MATERIAL: COLIMADOR LASER DE SLAMMERHI

      

      Hola de nuevo, dentro de los artículos sobre material vamos a revisar este colimador de la marca Slammerhi. Se diseñó, aprovechando la miniaturización de la tecnología láser para punteros y para los modelos de  armas de fuego, y así llenar un hueco que nadie antes había descubierto.

       Con la finalidad de poder poner en mira las ballestas para aquellos que no tenemos una galería de tiro en casa o un terreno en el que poder llevarlo a cabo, este material dice poder ayudar a conseguirlo con un espacio inferior a los 4 metros, incluyendo lo que ocupa la ballesta.

       En primer lugar, la imagen de la izquierda muestra lo que obtenemos al hacer la compra, un paquete en un envase plástico transparente conteniendo la flecha, cuatro pilas L626 y dos cuadrados de foam negro para inmovilizar los dos extremos de la flecha dentro del contenedor así como la hoja de instrucciones.



       El extremo posterior se desenrosca dejando a la vista el contenedor donde debemos introducir las baterías, aquí las cuatro pilas se introducen con la parte plana hacia atrás, al terminar, se vuelve a roscar el extremo de bronce, que a la vez actúa de interruptor, si no se aprieta del todo, está apagado, si se enrosca completamente se enciende el láser del extremo delantero y podemos proceder a ajustar la mira.




       Estos simples pasos nos permiten llegar al momento final, si disponemos de un banco de apoyo para la ballesta, o lo preparamos con saquetes de arena, o lo que podamos conseguir, debemos seguir lo pasos que te indican en las instrucciones.
       Activamos el laser, colocamos  la flecha en la ballesta, "SIN TENSAR LA CUERDA", es decir, deslizamos la flecha debajo de la cuerda de forma que ésta quede en reposo y movemos la flecha hacia atrás hasta que llegue al tope.



       Tal como se indica en grandes letras en rojo en la parte delantera del tubo (DO NOT FIRE), esta no es una flecha normal que se pueda disparar, en caso de equivocarte y llegar a dispararla, el daño que se produciría en el dispositivo del laser por el impacto de la punta seguramente reduciría el valor del material a cero.
         El peso de la flecha colimadora al completo es de 34 gramos (531 grains) de modo que si la disparamos por accidente, la ballesta no tendría mayor problema por ello, pero seguramente sería desastroso para el conjunto láser por el impacto.
        Siguiendo el proceso de ajuste, nos indican las instrucciones que una vez colocada la flecha con el láser encendido en la ballesta y ésta a su vez en el banco, procedemos a colocar la diana a una distancia de 7 piés (2,14m) y procedemos a apuntar con el láser al centro de la diana.
       Cuando tenemos el láser en el centro, podemos apagarlo (el consumo de baterías es elevado y en funcionamiento contínuo las agota en unas dos horas) y a continuación procedemos a hacer coincidir nuestros sistemas de puntería con el centro de la diana. Tan sencillo como eso.
       El siguiente paso será salir al campo o lugar de práctias y colocar un blanco a 20 yardas (+-18m) y practicar el tiro, al menos tres, para corregir alguna posible desviación.
       Existe una gran variedad de marcas, modelos y potencias en las ballestas de hoy en día (así como con las flechas y puntas que cada uno utiliza), por ello siempre será necesario para cada caso en particular el realizar unas tandas de práctica para ver los ajustes finales que deberemos realizar. Es evidente que no se pueden comparar las prestaciones (y vuelo de la flecha) para ballestas con velocidades de salida de 280pps ó 400pps, con lo que ésto afecta a la caida de la flecha y por ende a las miras.
       En este caso sería conveniente que nos hagamos una tabla de referencia y la siguiente vez que procedamos a utilizar este colimador láser, sabremos el diferencial que tenemos que tener en cuenta al ajustar la mira a la distancia corta (7 piés) para una misma ballesta.
     En definitiva, un nuevo gadget (juguetito) para ir conociendo las posibilidades de las herramientas que van naciendo entorno a este mundo de las ballestas que cada día nos depara nuevos inventos (más o menos necesarios y más o menos útiles).

       Buena caza y hasta la próxima.
© Texto y Fotos Juan C.Cabrera Vera.