FLECHAS:son, al igual que en los
arcos, la razón de ser de este arma, todo lo que se hace es para
terminar arrojando una flecha hacia un blanco.
Una ventaja que presentan las flechas
de ballesta al volar, es que van en línea recta, mientras que las
de arco van "culebreando". Este factor se tiene en cuenta cuando se fabrican
flechas para arco, pero en el caso de la de ballesta no, pueden ser más
rígidas (lo que ocurre cuando usamos el mismo material para menores
longitudes 16' ó 20' frente a las 28' ó 30' de las de arco)
Por el material del que se construyen
la hay de madera, aluminio, fibra de vidrio y carbono. En cada caso
debemos controlar el peso de la flecha siguiendo las indicaciones del fabricante
sobre peso mínimo de la flecha o dardo a lanzar (completa, no sólo
el tubo), en caso de que tiremos flechas de menor gramaje las palas sufrirán
las consecuencias.
Las medidas de los vástagos
de madera son estandarizadas (hay dos) salirse de ellas sin tener la certeza
del material que usamos puede ser una aventura peligrosa.
Las flechas de aluminio vienen señaladas
con cuatro números en el tubo, 2018 - 2117 - 2219 -2315 ...
Para los que no los conozcan diremos que los dos primeros dígitos
indican el DIÁMETRO EXTERIOR en 1/64 de pulgada, mientras
que los dos siguientes nos indican el GROSOR DE PARED del tubo en 1/1000
de pulgada. El tipo de tubo para cada necesidad varía generalmente
en función de la potencia de las palas, cuando se tira al blanco
las flechas son más finas (menor diámetro) pero las utilizadas
para la caza son más gruesas (mayor diámetro) todo ello por
la potencia de cada caso (80-90lb frente a 150-185lb).
Los tubos de carbono también
son utilizados, cada día más, al principio su uso era minoritario
por presentar algunas limitaciones o inconvenientes (para cazar) en los
primeros modelos que aparecieron, los actuales presentan una disposición
diferente de las capas de carbono que evita que se formen astillas cuando
chocan, dando en algunos casos resultados excelentes, son, actualmente,
los más difundidos por las mismas empresas constructoras de las
ballestas. Estos tubos de carbono también tienen una numeración
que indica sus propiedades, aunque no es igual que la usada en los tubos
de aluminio, generalmente indica la capacidad de flexión del tubo
(spin) para las de arco pero para las de ballesta esto no es necesario
y no viene indicado nada, sólo el nombre y el modelo de la flecha,
indiferentemente de la potencia de la ballesta, el tubo en este caso debe
ser "rígido", puesto que no necesita flexión, y ya está.
Todos los fabricantes de flechas de carbono para ballesta han optado por
regularizar el tamaño de los tubos, lo que les diferencia de las
de arco con su gran variedad de modelos para cada potencia y apertura.
En las flechas de ballesta se ha optado por que todos los tubos tengan
un diámetro exterior equivalente al de una flecha de aluminio del
calibre 2216, la otra indicación es la potencia de uso (por ejemplo
para usar con ballestas de 150 a 200 libras).
CULATINES: los culatines que utilizan
las flechas de ballesta son diferentes según el fabricante, aquellos
que consideran que la cuerda debe enganchar con la flecha utilizan unos
similares a los de las flechas de arco pero más resistentes, otros
cuentan con una pequeña hendidura al final tipo "luna"(moon)(lo
que condiciona el emplumado puesto que hay que tenerlo en cuanta para colocar
la pluma "gallo" si emplumamos de a tres), por último, los hay que
son completamente planos en material plástico o aluminio.
En el caso de hacer flechas de madera
y ser el vástago macizo, no es necesario poner culatín a
menos que tengamos un modelo de los primeros mencionados.
PLUMAS: las plumas son de dos
tipos: las de goma (vanes) muy sencillas, más baratas y duraderas,
y las de tipo natural (feather) más ligeras, presentan menos resistencia
al viento y son más frágiles y caras.
Para gustos colores, y tanto unas como otras las encontraremos
en gran variedad de colores, sus tamaños son estándar, desde
1 pulgada hasta 5 ó 6''.
Lo normal será poner 3 o cuatro
plumas a cada flecha, más comúnmente 3, algunos prefieren
poner 4 tanto en arco como en ballesta cuando se trata de cazar, aunque
en algunos casos se han visto flechas con 2 ó 5 plumas.
PUNTAS: este accesorio presenta
una diversidad increíble, podemos encontrar desde las tipo Field
(campo) en acero, Bullet (bala) en bronce, NIBB al 7% o 9% para tirar al
blanco, hasta una enorme diversidad para practicar la Caza; todas las que
existen para arquería son útiles para la ballesta, no hay
diferencias, sólo tenemos que adecuar nuestras puntas a la especie
que vayamos a cazar (evidentemente no es lo mismo tirar a aves, conejos,
ciervos, jabalíes, osos o búfalos) y estar pendientes de
que cualquier cambio significativo en el peso de esa punta afecta a la
puntería. En la página de enlaces encontrarás algunas
direcciones de fabricantes con las características de sus productos.
Todas las puntas suelen variar entre
los 75 ó 85 grains como mínimo hasta los 165 y en algunos
casos 225 grains (no confundir con gramos, 1 gramo = 15,43 grain).
Las puntas pueden ser de 2, 3 ó
4 cuchillas, fijas ó móviles, con sistema de anclaje para
evitar que se caigan del cuerpo del animal, con punta de metal endurecido,
para pescar (tipo arpón), para pequeños animales (sin puntas
ni filo, son como un tapón de goma para trasmitir la energía),
para pájaros (con lazos), ...
MIRAS: todas las ballestas vienen
equipadas con sus sistemas de puntería; para las de tiro al blanco
(IAU) existen normas específicas de distancias máximas entre
miras y el tipo a utilizar, cuando no se compite o se va de caza lo más
práctico es una telescópica que esté a tono con el
alcance que usamos (20m - 40m).
Se puede adaptar tranquilamente una
mira telescópica con poco aumento (2X - 4X es suficiente) normalizada
para carabinas de aire comprimido a precios bastante accesibles y con buenos
resultados. Cuando se utilizan diópteros y pins con altas potencias
las vibraciones suelen aflojar lar tuercas con las que están equipados
mientras que las miras telescópicas son más estables, siempre
conviene revisarlas cada pocos disparos y proceder al reapriete si en necesario.
Una variante de la mira es el llamado
punto rojo, que nos proporciona la proyección de un punto rojo sobre
el centro de la imagen que nos aparece en el visor, también se utiliza
para caza.
Algunos han intentado adaptar un puntero
láser para las ballestas, pero dada la pobre balística que
presentan las flechas en comparación con las balas, los que se colocan
sujetos a alguna parte del cuerpo sólo serían útiles
para tirar a una distancia fija, a no ser que pudiésemos adaptarlo
como la mira (sobre ella o en un lateral) eso siempre y cuando la ballesta
disponga de un sistema de compensación de alcance.
CARCAJ: Con este nombre se designa
a los diferentes tipos de contenedores para llevar las flechas. Los hay
para colgar a la cintura, a la espalda, sobre el muslo o unidas al cuerpo
de la ballesta (de forma lateral, transversal inferior, longitudinal inferior,
...).
La capacidad varía desde un
mínimo de 3-4 flechas hasta un máximo de 6-8 en los acoplables
al arma y una cantidad indeterminada (3-12) en los que se usan a la cadera.
Los carcaj de caza llevan las flechas sujetas para que no produzcan ruido,
mientras que los de tiro al blanco a la cintura son similares a los de
arco y las flechas van sueltas en los tubos contenedores.
ESTABILIZADORES: adaptación
o uso directo de los que se utilizan para arcos, se añaden a las
ballestas de tiro al blanco, mientras que las de caza no utilizan ninguno
salvo que alguien haya modificado alguna a nivel personal.
SILENCIADORES: (no tiene nada
que ver con los de las armas de fuego, es evidente) el único elemento
que es algo novedoso y se está aplicando para disminuir las vibraciones
es el "salva palas" (limb saver), también llamado "champiñón"
por su forma, que las absorbe y mejora tanto el rendimiento de las palas
que componen el arco como su duración (al vibrar menos hace menos
ruido, factor a tener en cuenta). Existen para ballestas con palas
recurvadas, semipala entera con polea y semipala partida con polea -Quads-(exactamente
lo mismo que en arquería).
En Excalibur han desarrollado el "Dissipator
Bar". Este es un dispositivo que se coloca delante de las palas y mediante
una barra equipada con unos tacos de goma absorben las vibraciones que
se producen en las palas tras la salida de la flecha.
También como artilugio para
disminuir el ruido y las vibraciones (en este caso de la cuerda) encontramos
un viejo invento, los "silenciadores" tipo "string leech", "catwishers"
o "castor", se colocan en las cuerdas y reducen el ruido que provocan en
el disparo al resonar con la vibración (con una pequeña penalización
en velocidad). En el caso de la ballesta al tener mucha más potencia
que un arco, la duración de estos elementos es inferior.
Sims, el conocido fabricante de los
silenciadores tipo "champiñón", ha desarrollado un kit para
ballestas que incluye los Limb Saver (para los dos tipos de palas), dos
String Leeches (para las cuerdas) y un bolt retainer dampener.
Ten Point ha desarrollado un equipamiento
similar con tecnología de NAP (silenciadores de pala, de cuerda
y de flechas).
Horton ha trabajado en esa línea
con unas bandas de material que se comporta como sólido y líquido
que adherido a las palas, y a cualquier elemento susceptible de producir
sonido por vibración, se encarga de eliminar el ruido producido.
(Sound Stoper Strips)
AYUDAS AL MONTAJE (TENSADO): ya
existían en la Baja Edad Media y dada la potencia que tenían
algunos modelos no había otra forma de tensarlas.
Consisten en una serie de artilugios
que nos faciliten el llevar la cuerda a su posición de tensado y
sujetarla con el sistema que posea nuestra ballesta. El más sencillo
es una cuerda que, pasando por la parte posterior de la base de la mira,
engancha la cuerda por los laterales del cuerpo central con dos piezas
de plástico y reducen el esfuerzo en un 50%.
El resto de sistemas implica el uso
de mecanismos con engranajes, manivelas, palancas, ... que como se puede
deducir aprovechan las ventajas de estos principios para multiplicar la
fuerza de nuestro cuerpo y convertir la carga en una tarea menos agotadora
(sin embargo se tarda más tiempo en cargar y primero hay que colocar
el aparato en posición, con lo que se alarga más aún
el tiempo necesario para volver a estar dispuesto para tirar).
Son una gran ayuda cuando el tirador
tiene alguna deficiencia (física) que le impida realizar el esfuerzo
que lleva tensar la cuerda de la ballesta, recordemos que 150 lb equivalen
a unos 70 kg y hacer ese esfuerzo correctamente (coordinación de
piernas, brazos y espalda) una o dos veces no es lo mismo que hacerlo unas
75 ó 80 veces. Una o dos veces corresponde a un cazador, puede que
sólo lo haga ese número de veces en un día cazando,
mientras que el otro número corresponde a un día tirando
dos series de 30 flechas a dos distancias, incluyendo algunos tiros de
prueba para ajustar.
En el caso de personas muy discapacitados
también existen versiones de estos artefactos con motores eléctricos,
que realizan totalmente el trabajo de tensado de la cuerda.
Fabricantes como BARNETT, TEN POINT
(HUNTER), HORTON Y EXCÁLIBUR incluyen uno o varios de estos accesorios.
(En unos pocos estados dentro de los EE.UU. sólo permiten la caza
con ballesta a los discapacitados físicos, motivo suficiente para
que se desarrollen estos elementos en un mercado que puede tener
miles de aficionados/clientes sólo en un estado)
FUNDAS CONTENEDORAS: como se puede suponer,
son forros de material flexible para guardar las ballestas, exteriormente
tienen una forma inconfundible, pueden ser impermeables y hay modelos en
camuflaje de varios tipos.
Sencillas, permiten mantener la ballesta
limpia. Su inconveniente es que no protegen de los golpes como las maletas
rígidas, en cambio su ligereza y el ser lavable son puntos a su
favor. Algunos modelos disponen de bolsillos para llevar accesorios.
Hay diversidad de fabricantes, genralmente
cada fabricante tiene en el mercado uno modelo propio o incluso varios
con los que satisfacer las demandas de los consumidores.
MALETAS: son rígidas, normalmente
de plástico o fibra y con más o menos refuerzos en cantos
y esquinas. El interior varía según modelos y marcas y pueden
disponer de separaciones para los distintos accesorios y herramientas que
deseemos llevar, también lleva acomodo para una cantidad adecuada
de flechas (más de 12).
Ventajas en cuanto a su resistencia
a los golpes, material lavable, ... En su contra el peso y que cuando
sacamos la ballesta no podemos doblarla para que ocupe menos sitio como
es el caso de la funda.
Al principio la mayoría de los
modelos son de las maletas usadas para arquería, en ninguna de las
que he visto se puede guardar una ballesta completa, hay que proceder al
desmontaje de la misma, aunque la mayoría de las que podemos encontrar
pueden dividirse fácilmente en dos o tres partes (arco, cuerpo,
estribo) con lo que sólo nos queda buscar la más adecuada
a nuestro modelo con las medidas que nos ofrecen los constructores de maletas.
Seguramente impulsadas por el
auge de mercado de las ballestas de caza en USA y Canadá, algunos
fabricantes han desarrollado modelos exclusivamente para ballestas.
Ahora la casa SKB
ha sacado por fin al mercado una maleta rígida para ballestas,
se trata del modelo 8000. (SKB-8000)
También
HORTON ha sacado al mercado un modelo de maleta rígida para
ballesta con espacio para los accesorios más comunes, flechas, ...
tiene la ventaja de incorporar ruedas para desplazar la maleta cuando la
llevamos por pasillos,...
La marca PLANO,
asimismo, ha sacado un modelo de plástico rígido que es específico
para ballestas, es más económico y sencillo que los dos anteriores
(SKB y HORTON) y también fabrica una variante con el logotipo de
TEN POINT que distribuye esta marca.
LA última
en incorporarse a este grupo ha sido el fabricante FLAMBEAU, que
ha sacado otro modelo de plástico rígido de similares características
que los de PLANO y HORTON. Todas son marcas USA.
EQUIPO DE MANTENIMIENTO: como mínimo
debe constar de cera para la cuerda, aceite lubricante del rail o carril,
aceite para las demás partes móviles (poleas, mecanismos
de la caja del gatillo), paño de limpieza.
La cera la aplicaremos cada vez que
sea necesario sobre las cuerdas, pero no en la zona central (la parte reforzada
que se mueve sobre el rail de lanzamiento y que, en contacto con la flecha,
la empuja). Su uso prolonga la vida de la cuerda.
El aceite lubricante de rail se aplica
sobre este elemento de la ballesta para facilitar el desplazamiento de
la cuerda sobre él y disminuir el rozamiento que se produce cuando
empuja a la flecha. Aumenta (mucho) la vida de la cuerda, puesto que este
el el punto más débil y que hay que vigilar constantemente
y favorece una velocidad constante de salida.
Aceite para las poleas y demás
partes móviles, como toda pieza en movimiento conviene tenerla bien
engrasada y así no tener pérdidas de eficacia por mal mantenimiento
que pueden darnos algún disgusto. Ninguna pieza móvil debe
"gruñir" cuando se mueve, es síntoma claro de que no está
lubricada o limpia. Cuando procedamos al aceitado o engrase, es importante
eliminar todo el aceite sobrante (no debemos quedarnos cortos ni pasarnos)
para esto vale con un paño o papel que absorba lo que está
de más.
Después de cada uso conviene
revisar todos los componentes de nuestra ballesta, así como los
accesorios y limpiarlos para guardarla en perfectas condiciones. Algunas
partes son más propensas a ensuciarse como el estribo, las flechas,
el rail, parte posterior del cuerpo, pistolete y culata.
No podemos olvidar el juego de herramientas,
generalmente llaves Allen en medida de fracción de pulgadas, destornilladores
y otro tipo de llaves que proporcione el fabricante, que nos permitan montar
y desmontar la ballesta en sus distintos componentes, así como mantener
apretados todos los tornillos que ésta lleve, no debemos dejar nunca
de revisarlos, un tornillo suelto puede dar lugar a un incidente/accidente
muy serio.
Tampoco estaría de más
contar con repuestos de aquellos componentes que puedan desgastarse con
facilidad para tenerlos a mano en caso necesario. Aunque siempre debemos
hacer una revisión completa de la ballesta antes de salir a usarla.
SISTEMAS DE ILUMINACIÓN:
cuando estamos cazando animales de hábitos nocturnos, como es el
caso de los jabalíes, y siempre que esté
autorizado por las normativas de cada lugar (en
España no se permite el uso de dispositivos que deslumbren a las
piezas), se puede acoplar a nuestra ballesta un foco, linterna o
similar que a nuestra discreción (pulsando un botón generalmente,
las armerías y revistas ofrecen diferentes modelos) nos ilumine
la zona delante del arma y donde se supone que está la pieza a cobrar.
En algunas comunidades autónomas, sus leyes de caza permiten el
uso de linternas para los aguardos de jabalí EXCLUSIVAMENTE y con
la única finalidad de identificar al animal en las duras condiciones
de las noches en las que a ojo no se puede comprobar a qué animal
le vas a tirar, y poder cumplir las restricciones que la orden de veda
te impone (no tirar a hembras paridas, animales del año, ....)
Este sistema es totalmente delator
de la posición del cazador, por lo que se hace necesario tener una
idea precisa de dónde está el animal porque el tiempo de
que se dispone para el disparo es de unos pocos segundos (el animal primero
estará sorprendido por esa fuente de luz, pero no va a estar toda
la noche en el mismo sitio).
Por si alguien se lo plantea también
existen visores nocturnos para armas, ya sean de intensificación
de imagen (segunda y tercera generación) y hasta alguno que funcione
por detección de infrarrojos (calor corporal) pero aparte de uso
policial/militar y en seguridad, están PROHIBIDOS, su uso para cazar
es ilegal por completo, al igual que los silenciadores de las armas de
fuego.
CORREA PORTADORA: sencillo accesorio
que nos permite colgarnos la ballesta a la espalda cuando nos desplazamos
de un lugar a otro y nos permite tener las manos libres.
Se pueden adaptar las de fusiles o
usar directamente las que nos ofrecen los fabricantes de ballestas, en
materiales impermeables, con cosido acolchado y telas en negro o diversas
variantes de camuflaje.
ADAPTACIONES: aquí como
adaptaciones nos referimos a las que se realizan para que pueda ser utilizada
por tiradores con graves deficiencias físicas, diferentes de la
ayuda al tensado, como es el caso de personas en sillas de ruedas, sin
un brazo o con el brazo paralizado, sin una mano, ...
Existen empresas que dadas las específicas
condiciones de un tirador en particular, realizan la adaptación
necesaria individualmente. Proporcionan una vía para aquellos que
presentando una discapacidad grave que afecte a los miembros (superiores
principalmente) deseen practicar este deporte.